9 mayo, 2025
Natalia Lacunza da un paso firme hacia una nueva dimensión musical con “Un Castigo”, el primer adelanto de su segundo proyecto de estudio, previsto para finales de año. En colaboración con el artista guatemalteco-mexicano Jesse Baez, y bajo la producción de Pau Paredes y Pau Riutort con arreglos de Ganges, la artista navarra se adentra en una narrativa mucho más madura, cruda y emocional. Un punto de inflexión artístico que confirma su crecimiento como compositora, vocalista y narradora.
A nivel sonoro, “Un Castigo” se mueve entre el pop electrónico introspectivo, el R&B atmosférico y una sensibilidad alt-pop que enmarca la voz de Natalia en un espacio íntimo y melancólico. Es una canción que juega con el minimalismo emocional, donde cada pausa y textura tiene peso. La incorporación de Jesse Baez —uno de los referentes del R&B latinoamericano— potencia esta atmósfera: “Cuando escuchamos a Jesse cantar el segundo verso, parecía que lo había escrito él”, explica Natalia. “Su voz y la interacción entre ambos le da al tema ese tono atemporal que lo hace brillar aún más. “Un Castigo” es intergeneracional.
El videoclip, dirigido por Héctor Herce —con quien Natalia ya colaboró en “Muchas cosas”—, traduce visualmente ese momento en el que la tristeza se vuelve física, cotidiana y silenciosa. Rodado entre escenas en color y blanco y negro, el clip despliega una estética cargada de simbolismo íntimo, la cámara se mueve con suavidad y extrañeza, construyendo un espacio onírico donde lo emocional y lo corporal se confunden. Este universo visual acompaña la densidad emocional de la canción con un lenguaje poético y contemporáneo.
© Copyright 2022 Universal Music Group N.V.